Ana Victoria Ávila, una joven de 28 años, era intensamente buscada en México desde el miércoles. Había llegado a ese país en diciembre con el propósito de continuar con su pasión por la fotografía. En su cuenta de Instagram se describía como fotógrafa documental, digital y analógica, destacando su trabajo en bodas tanto en Córdoba, Argentina, como en otras partes del mundo.
El miércoles, la familia perdió todo contacto con ella, desatando una campaña en las redes sociales para conocer su paradero. Lamentablemente, tras solo dos días de búsqueda, la peor noticia llegó: su cuerpo fue encontrado flotando en el mar cerca de una zona de hospedajes en Puerto Morelos, desnuda.
El hallazgo fue realizado por pescadores locales, quienes alertaron a las autoridades. La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) organizó un operativo de búsqueda y rescate por vía aérea y marítima. Aunque las autoridades calificaron el suceso como un «reporte de ahogamiento», las circunstancias exactas de su muerte aún no están claras, y la investigación está en curso a cargo de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo.
Tamara Combina, una de las amigas de Ana Victoria, expresó su angustia y fortaleza ante esta situación. Describió a Ana como una persona excepcional, una fotógrafa talentosa y una gran amiga.
Ana Victoria Ávila había estudiado en la Facultad de Artes y Diseño de la Universidad Provincial de Córdoba y en la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Córdoba. Trabajaba para Aconcagua Audiovisuales y también impartía cursos de fotografía en Tulum.
Era una apasionada viajera, como evidenciaban sus redes sociales, donde compartía sus aventuras por diversas ciudades y playas de Uruguay, Brasil y México. Además de su trabajo, mostraba su compromiso con diversas causas sociales, como los derechos de las mujeres y la comunidad LGBT+.