La investigación concluyó que Oliva y Rodríguez participaron en actividades ilegales relacionadas con la distribución de drogas dentro de un lugar de detención.
Los funcionarios Juan Manuel Oliva y Roberto Ariel Rodríguez, quienes desempeñaban tareas en la Unidad Penal N° 1 de Paraná, han sido imputados y condenados penalmente por delitos graves, incluyendo la distribución y comercialización de estupefacientes y la violación de los deberes de funcionario público. Debido a estos hechos, se ha confirmado su despido definitivo, según lo establece el Boletín Oficial Nº 28.020.
La investigación concluyó que Oliva y Rodríguez participaron en actividades ilegales relacionadas con la distribución de drogas dentro de un lugar de detención, un delito agravado tanto por el entorno en el que se realizaba como por el número de integrantes involucrados en la organización. Estos actos no solo violaron las normas penales, sino que también constituyen faltas graves que afectan la integridad y el prestigio de la institución penitenciaria.
Las condenas penales de ambos funcionarios han servido como base para justificar la máxima sanción administrativa: el despido definitivo. La Dirección General del Servicio Penitenciario de Entre Ríos expresó que, aunque los procesos penales y administrativos son independientes, en este caso las condenas respaldan plenamente las decisiones tomadas.